Palabras de aliento

¡Qué dulce es el Señor con nostras! Él nos ama, y lo demuestra todo el tiempo. Si alguien tiene buenas palabras, palabras de aliento y de vida para el alma cansada, ése es nuestro Dios. La educación en el hogar es trabajo de tiempo completo y un poco más, por lo que es bastante común que las mamás nos lleguemos a sentir cansadas, por decir lo menos. En otras ocasiones es más bien un “ya no puedo” o un “quiero tirar la toalla”. Es en esos momentos cuando podemos ver que el poder de Dios en nuestra debilidad se perfecciona, así que, si estás en uno de esos momentos, ¡ánimo!, Dios tiene cosas que decirte hoy, solo tienes que buscarlo y escuchar su palabra.

Me he dado cuenta de que una forma de tener la palabra de Dios presente en mi vida y en mi día, es con versículos por aquí y por allá. Algunos están impresos, enmarcados y colgados en los muros, otros sobre algunas repisas, algunos otros más en mi refrigerador o en mi calendario, otros más, apuntados en pequeñas tarjetas que puedo colocar en el espejo de mi recámara. Tener la palabra de Dios a la mano me permite tener un respiro incluso cuando los momentos difíciles se levantan. En varias ocasiones me he topado con que el Señor me está hablando justo lo que necesito a través de estas palabras.

Me dí a la tarea de transcribir algunos de mis versículos favoritos y acomodarlos en una imagen que encontré de modo que ahora los comparto contigo para que los puedas descargar e imprimir. El tamaño de la impresión es de una hoja carta, así que si quieres hacerlo, puedes imprimirlos a color, comprar algunos marcos sencillos y ponerlos en donde más te guste. Espero que te sean de tanta bendición como lo han sido para mí.